Simplemente... gracias

No pudo ser y el último partido que disputó anoche el Almería en nuestro Coliseo, acabó siendo para el rival, en esta ocasión el Sevilla. Fue un partido muy loco, de idas y venidas a las dos porterías, empezó siendo una disputa por dominar el centro del campo, como esto era difícil, los dos equipos optaron por jugar abiertamente al ataque.

Una de las acciones que marcaron el partido fue la expulsión de Negredo cuando no llegaba el partido aún el minuto 20 de la segunda parte, en una jugada de ataque sevillista, le pitaron a Álvaro un fuera de juego no demasiado claro, el delantero se giró e insultó al linier, lo que provocó su expulsion con roja directa.



El Almería estuvo dominando prácticamente todo el partido, aunque no se jugaba nada ya, si sentía el calor que trasmitían todos los aficcionados que acudieron ayer al Mediterráneo, y no eran pocos, más de 18.000 espectadores.

Durante toda la temporada, no se ha situado en ninguna jornada en los puestos de descenso, al igual que ocurrió en las temporadas anteriores, para un club modesto como el nuestro, es toda una hazaña.

Al terminar el partido de anoche, únicamente no terminó la temporada para el equipo, sino que también fue la despedida segura de varios jugadores y no tan segura de otros. Los nombres más claros para abandonar la disciplina almeriense y buscar nuevos horizontes son los de Diego Álves, Soriano, Domingo Cisma, Chico y Crusat, otros como Corona y el gran capitán Ortiz, están pendientes de hablar con el club acerca de su futuro próximo.



Simplemente dar las gracias a los que se marchan y a los que se quedan, por esas tardes inolvidables de fútbol en el Estadio, haciendo realidad un año más el sueño de poder estar en la Primera División del fútbol español, con partidos mágicos, remontadas inimaginables y sufrimiento cuando menos lo merecíamos.

El sueño para el año que viene es volver a firmar la permanencia, no nos hacen falta galácticos, solamente jugadores que sientan los colores, que se dejen la piel en el campo cada segundo del partido y sobre todo que sean humildes y vayan siempre con la cabeza bien alta, pues el Almería es un equipo jóven con unos números envidiados por muchos clubes que llevan décadas en la máxima categoría de nuestro país y por ello lo más importante es la humildad.